Te voy a dar una lista de libros cortos para leer en un fin de semana. ¿Por qué? Porque entiendo que a veces las agendas, la logística, etc. no permiten leer grandes novelas ni embarcarse en proyectos lectores más ambiciosos como sagas completas o ciclos literarios. Hay veces que queremos leer dentro de los márgenes que nos deja la vida. Por ejemplo, cuando salimos de viaje y apenas disponemos de un ratito para leer cuando llegamos al hotel.
He intentado que sea variada: hay clásicos, hay terror, de tinte social, victorianas, satíricas, de amores y pasiones, de reflexión…
Para esas situaciones, espero te sirvan estas recomendaciones:
Libros cortos para leer en un fin de semana (o cuando quieras)
Mendel, el de los libros
Seguramente mi novela corta preferida. A mayores, uno de mis libros preferidos de toda mi vida. Me encantó esta joya, breve, intensa, con sensibilidad, con Historia. Desde esta pieza, Zweig forma parte de mi canon personal.
Mendel es un librero de viejo. Un librero sin librería. Hace sus gestiones de adquisición, asesoramiento y venta en un café vienes: el Gluck. Allí le aprecian como el erudito que es, amén de las muchas personas que consumen en el local por acudir al consejo de Mendel. Pero cuando estalla la IGM, lo detienen y Mendel ya no volverá a ser el mismo. Un retrato del impacto de la guerra en la vida de personas cotidianas.
Almuerzo en el café Gotham.
El terror también tiene su hueco en esta lista. Del genio de Maine, encontrarás esta pieza de la mano de Nórdica Editorial, en su colección de ilustrados.
Stephen King estaba un día en Nueva York y pasó por delante de un restaurante. El maitre —que guiaba a una pareja a su mesa— le vio y le guiñó de una manera que a King le pareció cínica. Y listo. Se fue al hotel y estuvo tres días dando forma a esta historia. Así es King. O así lo cuenta. Tal vez haya algo de literatura en estos relatos que crea alrededor de sus relatos. El caso es que esta es una pieza amena, que se lee en nada y que te dejará pensando.
Pandora.
Novela corta publicada en 1884. Otto, un alemán de europeas maneras, conocerá a Pandora a bordo de un trasatlántico que les lleva a Estados Unidos. Allí, quedará totalmente embelesado con esta mujer que contrasta con él en casi todos los rasgos apreciables. Novela para leerla en su contexto histórico. Otto es Europa. Pandora es Norteamérica. Una pieza literaria que es una forma de dialéctica hegeliana, ya que Otto es la tesis, Pandora la antítesis y de su relación llegaremos a una síntesis que no te dejará indiferente.
Un mundo cambiante. Una potencia emergente, unas clases sociales en ascenso, y una mujer que ha tomado conciencia de su rol social y lucha ya por un nuevo espacio social.
Oscar Wilde siempre es una buena idea
Entra con Wilde en una trama que te va a picar la curiosidad, mientras te mofas de toda la sociedad victoriana, apergaminada, superficial y supersticiosa.
Un autor especial. Ironía, misterio y una prosa que está a un nivel superior, pues aunar eficacia y belleza expresiva no es algo fácil.
La edición es prácticamente una pieza de coleccionista a un precio razonable. ¿Qué más se puede pedir?
La prima Phillis. Un clásico victoriano para pasar una tarde memorable
En 1864, Elisabeth Gaskell publica esta novela corta. Si bien es un poco más extensa que las anteriores, es desde luego una novela excelente desde muchos puntos de vista.
Novela de amores tóxicos. Novela de limerencia. La limerencia es el estado mental involuntario que resulta de una atracción romántica hacia alguien en el que se siente una necesidad obsesiva de ser correspondido. Es la obsesión de ser amado.
Una novela sobre la hipocresía del puritano
Los Davidson (matrimonio de misioneros) y los Macphail quedan atrapados en la isla de Pago-Pago por un brote de gripe en su barco. Se alojan en una pensión, donde conocen a Sadie Thompson, una mujer independiente y estilo de vida libre que choca con la rígida moral de los Davidson, que la ven como una pecadora que redimir. Su obsesión por imponer sus creencias sobre Sadie desata un conflicto entre la libertad individual y el fanatismo religioso, culminando en un final impactante que cuestiona la hipocresía y los límites de la moral.
La autora nos confiesa el origen diabólico de su vocación literaria.
Relato, de carácter autobiográfico, donde Marina Tsvietáieva nos explica el origen de su vocación literaria. Para Tsvietáieva el demonio no es un ser externo, sino esa parte dentro de nosotros, la que nos empuja a romper las reglas, a ser inconformistas, alocados, creativos… Ese lado oculto que resulta imprescindible al escritor y ni que decir tiene, al poeta.
Una novela que deja ver el matiz tan especial de que estaba hecha esta mujer, que se suicidó como tantos otros, harta de un siglo XX tan cruel.
Si te apetece una corta y muy filosófica, no dejes de leer esta pieza breve.
Espero que esta lista de libros cortos para leer en un fin de semana te haya servido. Ojala puedas leerlos todos, pues no sobra ninguno. Feliz lectura.